Elise Allély-Fermé
Directora de Conservación en Pronatura México
Biografía
Elise Allély-Fermé es Directora de Conservación en Pronatura México, una organización de la sociedad civil con más de 42 años de experiencia en la conservación de la naturaleza. Elise es especialista en la gestión integrada del agua, y cuenta con diez años de experiencia en diversos ámbitos de la conservación de la naturaleza, la mitigación del cambio climático y la gestión integrada del agua.
Antes de asumir su cargo en Pronatura México, Elise aportó sus conocimientos especializados al Australian Rivers Institute, donde participó en el desarrollo de un marco de vigilancia ecológica para proyectos de conservación y los Sitios Ramsar en Australia. Además, fue cofundadora de “Youth Engaged in Wetlands” (YEW), una red internacional de jóvenes que fomenta la cooperación intergeneracional en el marco de la Convención de Ramsar sobre los Humedales. A través de YEW, Elise documentó la participación de los jóvenes en la conservación de los humedales y trabajó para institucionalizar esa participación en los procesos de la Convención de Ramsar, lo cual culminó en la elaboración de una resolución sobre los jóvenes apoyada por los Gobiernos de Australia y Costa Rica y varias organizaciones de la sociedad civil.
La trayectoria de Elise en el activismo ambiental comenzó con el puesto que asumió en la Secretaría de la Convención de Ramsar en Suiza, donde se dedicó a apoyar su aplicación y actualizar la información sobre los Sitios Ramsar en Europa. También dirigió programas de educación ambiental en el Parque Natural Regional de los Pantanos de Cotentin y de Bessin en Francia.
Elise es licenciada en Ciencias Ambientales por la Universidad de East Anglia (Reino Unido) y tiene una maestría en Gestión Integrada del Agua por la Universidad de Griffith (Australia). Fuera de su actividad profesional, disfruta haciendo ciclismo, explorando las montañas de México y tomando fotografías. Elise es una ciudadana del mundo: nació en Francia y su niñez y juventud transcurrieron entre Francia, Malí y Suiza. Posteriormente, estudió en el Reino Unido y España y realizó frecuentes viajes a los Estados Unidos para visitar a familiares.
Su pasión por la conservación del agua surgió durante el tiempo que pasó en Malí, donde conoció en carne propia los problemas para acceder a agua limpia. Este interés creció durante su estadía en Suiza, donde fue cada vez más consciente de las disparidades en el acceso al agua y el saneamiento. En sus estudios académicos en el Reino Unido profundizó en los comportamientos relacionados con el uso del agua y la gestión de los recursos hídricos en regiones con altos niveles de estrés hídrico, lo cual se ve reflejado en su compromiso con la promoción de un uso justo y sostenible del agua.
La trayectoria polifacética de Elise y las diversas experiencias que vivió han influido de forma única en su perspectiva y sus conocimientos especializados en materia de conservación, lo que la convierte en una fuerza extraordinaria dentro del movimiento mundial en pro del medio ambiente.
Preguntas y respuestas
¿Qué experiencia personal ha determinado o inspirado su trayectoria?
Hace diez años, apenas salida de la universidad, la Secretaría de la Convención sobre los Humedales me ofreció mi primer trabajo formal como Asistente del Asesor Regional para Europa. Esta experiencia me abrió los ojos y fue un paso fundamental hacia un mundo que no sabía que existía y por el cual siento una enorme pasión.
Ser parte de la Secretaría de la Convención de Ramsar, participar en las reuniones de la Conferencia de las Partes Contratantes, visitar sitios Ramsar y humedales, reunirme y trabajar con autoridades gubernamentales y ONG y conocer a aliados en el ámbito de los humedales me han dado el espacio y la confianza para crecer y comprender cabalmente la Convención, los humedales y las dinámicas sociales fundamentalmente relacionadas con los humedales.
No me considero una experta en la conservación o la restauración de humedales, pero creo que tengo la capacidad de comprender y admirar su complejidad, y para mí en esa complejidad radica su belleza; ser parte de la Secretaría me ayudó a comprenderlo. He conocido a personas extraordinarias que me han contagiado su pasión por los humedales. Estoy muy agradecida por haber tenido esa oportunidad.
¿Se ha sentido inspirada por alguien? Si es así, ¿qué aspecto de esa persona le ha resultado motivador?
Es difícil para mí señalar a un referente en particular. Ha habido muchos momentos diferentes en mi vida que me han inspirado. En concreto, diría que estas personas tienen en común el haberme inspirado a pensar de forma independiente y crítica, a cuestionar las cosas y a alzar mi voz. Mis padres fueron las primeras personas que me brindaron un apoyo constante y que han sido un foro de consulta para mi ideas.
Más recientemente, la directora de mi tesis de maestría, la Dra. Samantha Capon, de la Universidad Griffith, cambió mi manera de pensar sobre la conservación y también me dio confianza para aspirar a sueños aún más ambiciosos. Además de orientarme, me inspiró con su ejemplo de académica, ecologista, conservacionista, madre y mujer bondadosa y genuina.
Mientras escribía mi tesis, Sam me invitó a unirme a un grupo de mujeres estudiantes –todas ellas mentes brillantes y grandes personas–, que trabajaban en sus doctorados, o en sus tesis de grado o maestría. Fue un espacio positivo y constructivo basado en la idea del apoyo mutuo. Todo ello me ayudó a tener más confianza en mí misma.
En su labor de conservación de los humedales, ¿cuál ha sido el reto más importante al que se ha enfrentado y cómo ha influido esta experiencia en su dedicación para crear un impacto positivo?
Mientras trabajaba en la Secretaría, conocí a varios jóvenes que trabajaban en la conservación de los humedales de forma directa en sus propios países. Me impresionó mucho la labor que hacían y descubrí que buscaban entablar vínculos más profundos para hacer más y lograr un impacto positivo. Así es como empezamos con Youth Engaged in Wetlands: como una forma de conectar a jóvenes que querían lograr resultados y definir vías de participación constructiva en la Convención.
Como una de las jóvenes que integran la red, siento que teníamos un sentido mayor y diferente de la urgencia que supone la conservación de los humedales y de las medidas en favor del clima que han de adoptarse, así como de la importancia de hacer oír nuestra voz.
Considero que, al comprender la forma en que funciona la Convención, ayudé a otros jóvenes a entender los procesos de adopción de decisiones, ya que puede ser un ámbito intimidatorio si no sabes cuándo tomar la palabra.